El Ministerio Público reportó, el pasado 2 de agosto, un total de 26 casos de feminicidio hasta julio. Al día siguiente, el 2 de agosto, se registró un nuevo caso en Luque, por lo que suman 27 en lo que va del año. Esto apunta a que se produjo un promedio de 1 feminicidio cada 8 días, en nuestro país.
Entretanto, en los últimos dos años (2020 y 2021), el promedio fue de 1 feminicidio cada 10 días, porque en esos dos años la cifra total –de cada uno– fue de 37 feminicidios.
Además, ya se contabilizan 57 huérfanos, lo que supera el total registrado hasta diciembre del año pasado, que fue 50.
En ese contexto, habló en comunicación con RadioCast25, la especialista en psicología social, Dra. Raquel Iglesias, quien asegura que este flagelo trasciende el aspecto cultural, al destacar que las autoridades no pueden combatirlo efectivamente, permitiendo que decenas de mujeres pierdan la vida en manos de sus agresores, en la mayoría de los casos, sus propias parejas.
«Hay un silencio muy grande«
Iglesias manifestó que al hacer la comparación de los números, el escenario resulta muy preocupante porque apenas estamos empezando el mes de agosto y quedan los meses más críticos en cuanto a casos de feminicidios, que suelen ser entre octubre y noviembre.
«Ojalá que no ocurra, porque estamos hablando de vidas, familias y niños que quedan huérfanos, pero esa es la tendencia», sostuvo.
«Lo que yo noto es que hay un silencio muy grande, yo no escucho las voces que deben hablar, que deben expresarse y que tienen que advertir, porque se han dado casos bastantes graves. Tienen que correr la voz, tienen que llamar a la reflexión, llamar a recordar los factores de riesgos. Entonces, en primer lugar, yo veo una gran diferencia ya desde el año pasado», manifestó.
Normativa habla de prevención y acciones ante crisis
Por otro lado, Iglesias también cuestionó que cuando vemos que existe un aumento sostenido de feminicidios, como el actual, existen mecanismos que se pueden aplicar, que ya están establecidos en la ley Nº 5777 «De Protección Integral a las Mujeres Contra Toda Forma de Violencia».
Aseveró que esta ley, que es importante porque es la norma y mandato vigente a nivel país, cuenta con normas que se tienen que trabajar como la instalación de una mesa de crisis interinstitucional, que pese a esta articulación, no tendría avances significativos.
«Yo no escuché que se haya convocado a la mesa de crisis. Es el Ministerio de la Mujer el que tiene que convocar, si se ha reunido, perfecto, pero ¿cuál es el objetivo? Llamar a las partes principales, ver lo que no se está haciendo en relación a los años anteriores y qué es lo que se está haciendo mal», expresó.
Cabe resaltar que la ley señala textualmente que es el Ministerio de la Mujer el que debe encargarse de implementar políticas, estrategias y acciones prioritarias para prevenir, sancionar y erradicar la violencia hacia las mujeres, a través de los distintos organismos y entidades del Estado.
Además la norma indica que el órgano rector debe diseñar e implementar el Sistema Unificado y Concentrado de Registro que permita contar con datos y estadísticas que den cuenta de la realidad nacional en términos de violencia contra las mujeres.
La violencia contra la mujer, trasciende lo cultural
La especialista en psicología social afirmó que el machismo muchas veces guarda relación con patrones aprendidos, conceptos culturales que se tienen sobre cómo se terminan las relaciones o cómo son las discusiones de pareja.
«Imagínate que el caso de ayer, que escuché que dieron testimonio del caso de Luque, la señora estaba preparándose para irse de la casa», referenció.
«Ese es un tema cultural, es cierto, pero es importante señalar que la violencia contra la mujer es un crimen y es mucho más que algo cultural. Lo que es cultural son las pautas, los conceptos, entonces es importante hablarle a la comunidad, a la ciudadanía, enseñarle que esta no es la manera de dirimir los problemas de pareja», resaltó.
Ratificó que es necesario combatir estas costumbres, porque aseguró que si nos callamos y si dejamos que ocurra, estamos dando un mensaje de que eso ‘es así nomás luego’ y que ‘la gente termina nomás luego así en ciertos sectores culturales’. «Si uno quiere combatir en serio, hay que ir a los sectores, nada no se combate si no actuás», subrayó.
Iglesias señaló que no es tan importante hablar de cómo ocurrió un feminicidio, sino más bien enseñar cuáles son las pautas o factores de riesgos y qué señales hay que tener en cuenta.
Asimismo, instó a los vecinos o personas cercanas a la víctima de violencia que no tengan miedo de buscar y ayudar a esa persona que lo requiere, porque en muchos casos se han salvado vidas, gracias a quienes se involucraron.
«Hay que ser mucho más contundente y saber que si se está repitiendo (la violencia) ese es el camino al que se va a llegar (feminicidio). Hay que hacer un esfuerzo para sacarle de ahí», puntualizó.
«No está en la agenda el tema de la violencia»
Al ser consultada sobre cómo está encarando el gobierno este complejo problema, Raquel Iglesias remarcó que ve una gran diferencia con la manera en que se actuó anteriormente.
«Yo quiero hablar con mucha objetividad y quiero decir que mirando a años anteriores que la línea y la política principal que se está trabajando no es la violencia como algo trasversal, creo que hay un cambio en ese sentido. Lo que yo noto, con mucha objetividad, es que no está en la agenda el tema de la violencia, con la fuerza que tiene que tener», concluyó.