Asunción, como una de las ciudades más longevas de esta región del continente, todavía mantiene en pie vestigios edilicios de sociedades de siglos pasados. Sin embargo, aun no ha encontrado la manera de vencer a la desidia de años y a la falta de consciencia sobre lo que implica la conservación del patrimonio arquitectónico, para convertirnos en una ciudad que honra su historia.
El Centro Histórico de Asunción es el núcleo de esta comunión de edificios que datan de los siglos XIX e inicios del XX, y en donde se puede notar hasta hoy, el esplendor de estas grandes casonas y palacetes en plena descomposición, que adornaban las calles de una Asunción muy diferente.
Sin embargo, la falta de interés y criterio de preservación patrimonial por parte de las autoridades, así como la concentración de propiedades en cuatro o cinco familias, hicieron que el Centro Histórico de Asunción se convierta en una zona olvidada, decadente y gris, pese a ese encanto que aun mantiene y del que algunos comerciantes se resisten a abandonar.
En medio de esta desidia estructural de Asunción, así como el alto costo de los impuestos, la demolición de edificios históricos, la ocupación irregular de las plazas y el exceso de estaciones de servicios, la Municipalidad no termina de plantear una solución de fondo a este problema que aflige a los ciudadanos.
Los comerciantes, sin embargo, son claros en afirmar que no existen políticas públicas concretas diseñadas para remediar esta situación, en materia comercial, de territorio, defensa del patrimonio, seguridad, infraestructura urbana y tránsito.
Desidia histórica pero con vida propia
En comunicación con RadioCast25, Fiorella Galli, de la Asociación de Comerciantes y Empresarios del Centro Histórico de Asunción, dijo que la desidia en el Centro Histórico Asunción es de larga data.
“Esto viene desde hace varios años, varios intendentes que se han olvidado del centro, de hacer un plan como la gente –no parches– que pueda reactivar realmente el centro histórico de la capital de la ciudad”, refirió.
Sin embargo, reconoció que el actual jefe comunal tampoco estableció políticas públicas concretas para reactivar el Centro. “Desde que ganó la intendencia de Asunción, Óscar “Nenecho” Rodríguez, no vimos ningún plan concreto”, señaló.
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Con relación al abandono de comercios, aseguró que el centro no está vacío, porque tiene su vida propia, sigue teniendo la gente que se va a trabajar y eso da vida a los comercios, afirmó. Aunque reconoció que con la pandemia, el movimiento mermó significativamente, pidió que se tenga consciencia de lo que genera esa narrativa que destaca el deterioro del centro.
“Es crucial que la prensa deje de sacar la parte negativa, en San Juan nos juntamos un par de comercios para hacer juntos un San Juan y nadie se fue a ver cuánta gente fue. Es dañino cuando dicen que el centro es peligroso, de que ya no hay gente y que tampoco no es así”, apuntó.
Chocar contra la pared todo el tiempo
Fiorella Galli insistió en que no existe un plan diseñado y que varias veces intentaron apelar a la ayuda de la Municipalidad, pero no tuvieron éxito.
“Está el otro mensaje de la Municipalidad que empieza a querer ponerse en contra de los frentistas, diciendo que son los culpables, que quiere aplicar el estacionamiento tarifado, porque eso puede ser un freno para nosotros, entonces hay muchas cosas que son por falta de comunicación”, aseveró.
También recordó que pidieron bajar los impuestos y tampoco tuvieron una respuesta positiva, por lo que señaló que buscar esta reactivación o una solución real “es chocar contra una pared todo el tiempo”.
Existen otros responsables
El director del Centro Histórico de Asunción, Fernando Duarte, dijo a través de su cuenta de Twitter que nadie habla de la responsabilidad del Gobierno Central en el abandono en las fallas estructurales de Asunción.
Recordó que el plan de Metrobús fue sepultado, y que la construcción de las nuevas oficinas del gobierno van a generar un colapso en el tránsito de esa zona ante la falta de las obras del Metrobus. También refirió que el Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat cajoneó el Plan Maestro para la revitalización del Centro Histórico de Asunción (Plan CHA).
En este sentido, esta dirección de la Municipalidad ha realizado varias activaciones muy asistidas, que buscaron instar a los asuncenos a redescubrir el centro histórico, entendiendo que su recuperación debe ser una prioridad de todos los que habitamos la ciudad.
Por su parte, el jefe de Gabinete de la Comuna Capitalina, Federico Mora, habló en RadioCast25 sobre la demolición del edificio de la ex ferretería Molino San Luis para construir una nueva estación de servicio y reconoció que existe un excesivo número de surtidores en Asunción.
Al respecto, alegó que a pesar de los intentos de la Municipalidad para mediar en el tema, fue la Corte Suprema de Justicia la que autorizó que algunos emblemas de combustibles puedan instalar sus estaciones a menos de 1000 metros entre sí en la ciudad, por lo que aseguró que esto les “ata las manos”.
En cuanto a la demolición de este edificio patrimonial, dijo que es responsabilidad de la Secretaría de Cultura y del Poder Judicial. Afirmó que ya el año pasado la Secretaría Cultura respondió a la Comuna asuncena que ese lugar no era un patrimonio histórico y que por consiguiente habilitaba al propietario la venta del inmueble, para el fin que sea, considerando la estratégica ubicación.
Posteriormente, acotó que hubo dos notas de Cultura, la primera, ordenando el cese de las obras, y luego declarando como patrimonio histórico ese lugar. Luego, el nuevo propietario del local presentó un amparo ante la Justicia y se hizo lugar a ese amparo, por lo que, se decidió la demolición del lugar.
Cuatro ejes que se pueden aplicar en Asunción
La Asociación de Arquitectos del Paraguay publicó un material sobre los cuatro ejes que se pueden aplicar en Asunción, en atención a lo que se debe mejorar en la capital para revitalizar el Centro Histórico.
En primer lugar, habla del sistema de transporte público, que se implemente una red de transporte nueva que incorpore estacionamientos, así como se hizo en Curitiba y Montevideo.
En segundo punto, resalta que se requiere de la flexibilización la ley N° 5621 de patrimonio, para que permita, por ejemplo, el acceso de vehículos en casonas históricas con exoneraciones. “Lo cual induciría la construcción de edificios de viviendas sobre el patrimonio como se hizo en Buenos Aires”, afirma el material.
El tercer punto, hace referencia a la red de veredas continuas y anchas sin obstáculos, con servicios subterráneos, en el Centro Histórico de Asunción, de igual manera que en Lima y Quito.
Finalmente, hablan de la necesidad de mayor inversión social para la Chacarita, pobladores que “deben ser atendidos con infraestructura, programas sociales, culturales, educativos y deportivos incluidos en el planeamiento urbano, como Bogotá y Medellín”, concluye.
Hay que insistir a las autoridades rectoras que hagan cumplir la ley
La arquitecta, Natalia Antola, ex directora General de Patrimonio Cultural de la Secretaría Nacional de Cultura, manifestó que hay una serie de falencias. Resaltó que hace falta hacer cumplir las leyes y afirmó que a la Municipalidad le “falta más más garra” para hacer más propuestas.
“Está este tema de la exoneración de impuestos, que es un aliciente, para que los propietarios puedan poner en condiciones su edificaciones. En realidad hace falta un mecanismo de control, pero también hay que colaborar con algo. Bajar los impuestos en el Centro Histórico o facilitar las exoneraciones”, consideró.
Recordó que existía un plan con fondos del Banco Interamericano de Desarrollo, que quedó en el opareí, porque –según dijo– no hay ningún actor que sea lo suficientemente responsable para llevar adelante estas iniciativas.
“Habría que insistir a las autoridades, que son las encargadas de hacer cumplir la aplicación de la ley, en este caso la Secretaría Nacional de Cultura y la Municipalidad, porque si nosotros empezamos a meter otra vez del Congreso por separado es una debacle, le quitan la institucionalidad a estos dos órganos que son rectores del patrimonio”, concluyó.
