Asunción, capital de la República del Paraguay y pese a ser conocida como ´madre de ciudades´, no se ha caracterizado por ser una ciudad ordenada, limpia ni pensada para el bienestar de sus habitantes. Si bien el desarrollo se dio de manera descontrolada y sin regulaciones, las administraciones municipales hasta hoy no han sabido como solucionar el problema territorial.
De hecho, desde los primeros años de la década del 2010 cuando la Costanera de Asunción, comenzó a ser una realidad, ya se auguraba que la falta de planificación, afectaría también a esta nueva zona de la ciudad, rica en ecosistemas y en potencial de ser uno de los lugares de esparcimiento preferidos por los asuncemos.
Pero la posibilidad de que la Costanera esté al servicio de la ciudadanía para su recreación y espercimiento, podría estar en riesgo a juzgar por un plan que está impulsando la Municipalidad.
La comuna capitalina anunció que subastará terrenos de lo que era llamado décadas atrás, la Franja Costera de Asunción, con el objetivo de pagar algunos gastos corrientes y destinar el dinero que resulte de estas operaciones a financiar el sistema de desagüe pluvial, una histórica deuda de Asunción con sus habitantes.
Federico Mora, jefe de Gabinete de Asunción, emitió un comunicado en el que señaló que el terreno que se pondrá a la venta es un espacio delimitado por un polígono de la «Eco Bahía», y que la intención era construir un «Puerto Madero en Asunción», haciendo alusión a la exclusiva zona de Buenos Aires que aglutina a restaurants, espacios de recreación y bares.
Agrega que esto es parte de un convenio firmado entre el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) y el Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH). También afirmó que el diseño incluye la construcción de 750 viviendas sociales en la zona, conforme a lo solicitado por el Arzobispado de Asunción, para paliar el déficit habitacional y además concretar la reubicación de centenares de familias de las zonas bajas de la bahía.
En ese contexto, Melina Pekholtz, arquitecta y activista urbana de Asunción Causa Nacional, en comunicación con Latitud25, pidió transparencia a las autoridades municipales porque aseguró que hasta el momento todo se trató con opacidad.
«No se están haciendo las cosas de manera transparente y no hay confianza. Exigimos que se pare la pelota acá para analizar lo que se quiere hacer y que se presente un proyecto con el uso especificado. Se necesita explicar mejor en el marco de qué se está haciendo esto y también preocupa cómo se va a manejar el dinero resultante de esta subasta», manifestó.
Usar para gastos corrientes o el desagüe pluvial «sería un error«
El consultor y urbanista Marcelo Kublik, consideró que es un error pensar en utilizar el dinero de la venta de la subasta para invertir en gastos corrientes que tiene la Municipalidad y aún así en la construcción del esperado sistema de desagüe pluvial.
Recordó que existe un documento que es el Plan Maestro de la Franja Costera que es uno de los primeros planos urbanos que tiene esta ciudad y desde el cual se hizo el plan de desarrollo urbano ambiental de la ciudad, que es un instrumento técnico y jurídico.
«Es un plan que tiene muchos componentes, como las calles, las avenidas y todo el territorio que todavía no existe. La Costanera es un componente de ese sistema viario. El plan maestro no es la avenida, es generar un nuevo territorio urbano respetando algunas zonas valiosas por una cuestión ambiental y por la biodiversidad que existe en el lugar», resaltó.
Acotó que la idea original motora del plan maestro es resolver la situación de riesgo de las personas que viven en los bañados de Asunción, que son más del 10% de la población de Asunción.
«Según los últimos censos, hay más de 50.000 personas distribuidas entre el Bañado Sur y el Bañado Norte, pero no son formales vamos a decir (….) Es una masa de gente importante y no se puede dejarles de lado, no se puede ignorar su existencia, eso es lo que busca, resolver el problema de riesgo de esa gente y aprovechar el frente fluvial para todos», subrayó.
Siempre se previó que haya zonas para el sector privado y emprendan inmobiliario, la cuestión es que lo que se haga en la franja costera o lo que resulte de la gestión de esos espacios permitan invertir en otro sector de la franja costera para ir armando esa zona de la ciudad, porque no hay plata.
«Es ilógico que se gaste plata en gastos corrientes, para pagarle a funcionarios o para hacer el desagüe pluvial. La Municipalidad tiene que buscar esto, a mí me tocó trabajar en la primera etapa de la Costanera. La Municipalidad tiene que lograr un acuerdo con el Estado para buscar fondos de entidades multinacionales que puedan financiar esto», subrayó.
Un problema de gestión
Por otra parte, Kublik recordó además que el componente de la Avenida Costanera fue gracias a la gestión del Estado a través del MOPC, que empezó durante el gobierno de Fernando Lugo, bajo esa idea de tenerla lista para el bicentenario de la independencia nacional.
Señaló además, que la Costanera Sur se está llevando a cabo con dinero proveniente de una alianza público privada con bancos privados, y en lo que enfatiza, que no fue por gestión de la Municipalidad.
Manifestó que actualmente ya se tiene el plan, pero que el problema es la gestión, porque la Municipalidad quiere vender bajo una subasta, cuando se puede buscar otras opciones para obtener beneficios sin necesidad de comprometer de manera indefinida estos terrenos.
«Se puede hacer concesiones, por equis años y se puede también alquilar. En el Reino Unido o Israel, las tierras son del Estado y no existen propietarios, el Estado le concede el permiso por 99 años y después tienen que renovar el permiso, esa lógica se puede hacer acá y pueden salir beneficiados los ciudadanos», apuntó.
Otro punto que mencionó es la manera en que se está manejando esta intención.
«Lo que genera desconfianza es que la Municipalidad presentó una ordenanza en la cual el artículo primero decía que iban vender todas las tierras de la franja costera. Saltó la gente, se hizo el reclamo y ahí sacaron un comunicado diciendo que es una parte, acá no hay confianza hacia quienes están administrando, es como que están haciendo una prueba y si nadie les pilla, van a continuar con eso y así no se gobierna seriamente», cuestionó.
En ese punto, indicó que el frente fluvial de cada ciudad es súper valioso, por el paisaje y por la oportunidad de desarrollar negocios, además de otros factores.
Finalmente, dijo que la Municipalidad tiene toda la prerrogativa jurídica, pero se preguntó quién va a controlar y cómo se va a usar la plata.
«Este es el comienzo de un proceso que una vez que se inicia, va a ser muy difícil parar si hay algo más, si hay algo turbio, o algo que nos e maneja bien va a ser imposible parar», concluyó.
Proyecto podría generar segmentación
Raúl Constantino de la Cámara Paraguaya de Desarrolladores Inmobiliarios (CAPADEI), comentó que, desde este sector consideran que, primero, debe ser claro el objetivo y, segundo, que la idea de hacer un «Puerto Madero», similar al de Buenos Aires, en la Costanera de Asunción, puede causar una segmentación en la población que frecuenta estos lugares.
«No es nomás vender la tierra, nosotros no estamos en contra de que haya una venta, pero primero ante un marco trasparente, donde todos puedan participar, lo más importante aún, es que haya un plan permanente, lastimosamente vimos que no hay», cuestionó.
Asimismo, también indicó que hoy en día no está definido qué se va a hacer, dónde y cuándo.
«Hay casos de terrenos municipales que se venden, por diferentes circunstancias, yo creo que lo más importante, es qué se va a hacer y dónde se va a hacer. No una cuestión de decir quiero poner acá un Puerto Madero, hacer un Centro Turístico… Hoy en día en la Costanera vos te vas y le ves a cualquier tipo de persona. Creo que el Puerto Madero puede segmentar a la población», acotó.
Finalmente dijo que en muchas oportunidades se discutió que algo se tenía que hacer en esa zona de la Franja Costera pero reiteró que tiene que tiene que existir adhesión a un plan regulador.