Desde el inicio de la pandemia la mayoría de los estudios se enfocaron en el efecto del COVID-19 en el sistema respiratorio. Si bien, ya pasó más de un año de la expansión del virus y ya fueron creadas al menos 200 líneas de investigación científica para desarrollo de vacunas para reducir su gravedad, constantemente se siguen registrando nuevos descubrimientos.
Los esfuerzos médicos están enfocados principalmente en que los pacientes que ingresan a los hospitales a causa del nuevo coronavirus superen el cuadro viral y sobrevivan, pero ¿qué viene después?, ¿realmente uno está a salvo al salir del hospital?
Según un estudio publicado por la revista The Lancet Psychiatry, el pasado 6 de abril, se han registrado secuelas neurológicas y psiquiátricas, a causa del COVID-19, seis meses después de haber superado el cuadro viral.
No obstante, en el documento médico se aclara que se necesitan más datos para evaluar adecuadamente los efectos de COVID-19 en la salud del cerebro.
Asimismo, según un artículo científico de SpringerLink, publicado en enero de este año, los síntomas neurológicos comunes son; mialgia, dolor de cabeza, estado mental alterado, confusión, delirio y mareos.
Además, también se abordan sistemáticamente las manifestaciones y complicaciones neurológicas que son de gran preocupación, como apoplejía (trastorno vascular del cerebro), trombosis venosa cerebral (sinusal), convulsiones, meningoencefalitis, síndrome de Guillain-Barré (hormigueo y debilidad en las extremidades), síndrome de Miller Fisher (enfermedad autoimune), mielitis aguda (inflamación de la médula espinal) y síndrome de encefalopatía posterior reversible (SEPR), señala un fragmento de la publicación.
Ataques de pánico y desorientación
Pacientes que lograron superar la enfermedad en su versión más severa han coincidido en haber experimentado reacciones repentinas como desorientaciones y hasta ataques de pánico.
No hay evidencia científica concreta si esas reacciones son producto de la afectación propia del virus; si tiene algo que ver el efecto adverso de algunas de las medicaciones que se suministran durante el tratamiento o si se deben a la abstinencia de los fármacos, en los días posteriores al alta médica.
¿Qué ven con mayor frecuencia los médicos en Paraguay?
La doctora Gloria Meza, titular del Círculo Paraguayo de Médicos, comentó que entre las principales consecuencias del COVID-19 encontraron trastorno del gusto, gente que no lo recupera durante bastante tiempo después de superar el cuadro viral.
Agregó que suelen notar con frecuencia dolores de cabeza en los pacientes después de que superaron el COVID-19 casi permanente durante un tiempo. “No sabemos si estas personas tienen una polineuropatía o si es por el tiempo en el que se quedan acostados y no tienen un apoyo fisioterapéutico”, expresó.
Comentó que desde el punto de vista médico consideran que esas personas que presentan un dolor de cabeza probablemente hayan tenido un proceso inflamatorio cerebral, por lo que pueden tener una encefalitis producida por el COVID-19. “Pero nunca pudimos confirmar eso, porque usted sabe que esos pacientes no se hacen todos los estudios”, aclaró.
Al ser consultada sobre el tiempo de la aparición de estas secuelas, respondió que se puede detectar incluso antes de los seis meses, en algunos casos, se observa en pacientes a los dos meses de que hayan superado el COVID-19.
«Habría que hacer muchos estudios para evaluar bien, yo creo que el problema del gusto se debe a una lesión en el nervio olfativo. Entonces nosotros damos un tratamiento para una polineuropatía, es decir, nosotros tratamos el nervio periférico para que se actúe en ese nivel», resaltó.
Añadió que además suelen ver en estas personas, estados depresivos y fatiga fácil. No obstante, aseveró que se deberían realizar más estudios para evaluar bien la situación de las personas convalecientes.
Finalmente reflexionó que muy poca gente consulta post covid y consideró que todas las personas recuperadas estarán con algunas secuelas por algún tiempo.
«Tratamiento muy largo y muertes súbitas»
La doctora Yolanda González, directora del Hospital Nacional de Itauguá, centro de referencia del COVID-19 en Paraguay, expresó que el tratamiento post covid es bastante largo. Recordó que los pulmones se ven bastante afectados por esta enfermedad incluso de personas jóvenes. «El pulmón queda con una lesión orgánica que no va a pasar así nomás», acotó.
González comentó que están realizando los controles posteriores en los pacientes que salen de la sala de internación. Agregó que incluso se están viendo casos de muerte súbita, a causa de un infarto. Este infarto, puede darse luego de que el paciente salga de alta y vaya a su casa, debido a una coagulopatía, uno de los efectos de esta enfermedad.
La doctora resaltó que el nuevo coronavirus afecta muchos órganos vitales del cuerpo, señaló que también produce problemas renales y recordó que cada vez son pacientes más jóvenes los afectados por la enfermedad y sus secuelas.