Corremos para todo, andamos a las apuradas para llegar a un lugar, para comer, para comprar y a veces se nos pasa fijarnos en los detalles. Hablemos en serio, ¿solés fijarte en lo que dicen las letras pequeñas de los productos? ¿al menos mirás el vencimiento de todo lo que comprás? Lo cierto es que muchas veces aunque nos fijemos, no sabemos qué requisitos deben cumplir los etiquetados y en varias ocasiones la información que dan no es muy clara.
En Paraguay, las normas están reguladas por el Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN), la institución encargada de otorgar los registros a las marcas que quieren lanzar su producto al mercado y ponerlo en una góndola.
Actualmente, ya rigen varias normas de etiquetado que están armonizadas con el Mercosur, e incluso hay proyectos de ley presentados pero que no fueron tratados, así como la intención de aplicar el etiquetado frontal en una acción coordinada con otros países.
¿Qué es el etiquetado frontal y por qué es importante?
Desde el INAN explicaron que el etiquetado frontal nace en el marco de la preocupación a nivel mundial sobre el aumento de la obesidad y las enfermedades crónicas no trasmisibles relacionadas a la obesidad. El objetivo de este tipo de etiquetado, es trasmitir información simplificada a los consumidores sobre los componentes nutricionales críticos.
Este estilo de etiquetado es una herramienta importante que varios países están utilizando como parte de la lucha para la disminución de esas enfermedades.
No obstante, la Lic. Zunny Zarza, Jefa de la Unidad Asuntos Regulatorios del INAN, aclaró que esta lucha debe tener múltiples abordajes, ya que esa información no garantiza un cambio de hábitos en los consumidores ni va a garantizar la reducción de enfermedades crónicas.
Lo que sí puede hacer el etiquetado frontal es ayudar al consumidor a realizar una compra más informada sobre el contenido de los nutrientes críticos del alimento que va a comprar para su consumo personal o familiar.
Para Paraguay es conveniente armonizar el rotulado frontal en el Mercosur, por medio de un reglamento técnico, así como están armonizados varios tipos de etiquetado, entre los que se incluyen el general, el nutricional y la información nutricional complementaria. «El rotulado frontal lo que va a hacer es complementar la información actual», enfatizó.
Por su parte, la tecnóloga en alimentos, Dalma Valeria González, también ahondó sobre la necesidad del etiquetado frontal.
Resaltó que hay casos de pacientes, con diabetes, por ejemplo, que dicen que no consumen muchos alimentos con grasa o azúcar porque eso piensan, pero en realidad están consumiendo productos, con su contenido oculto o disimulado, lo cual constituye un fraude alimentario, aseveró.
Países de la región caminan hacia el etiquetado frontal
En Uruguay entró en vigencia desde enero de este año el etiquetado o rotulado frontal de alimentos. En Argentina, este proyecto de ley generó conflicto en el Congreso, por lo que quedó sin quórum para su tratamiento, el pasado 5 de octubre.
En Paraguay, existe un proyecto de ley «Que establece la implementación del etiquetado frontal de advertencia conforme a su composición nutricional«, presentado en junio de 2019 y postergado (sin plazo) en marzo de 2020.
Independientemente a estos proyectos aislados en cada país, por otra parte, se encuentra la Comisión de Alimentos del SGT N° 3 Mercosur, que está trabajando para lograr un reglamento armonizado entre los países miembros, comisión que tiene como alta prioridad la aplicación del etiquetado frontal.
En representación de Paraguay, se encuentra el INAN trabajando en esta normativa. Zunny Zarza, explicó que esperaban finalizar el análisis de esta normativa para diciembre de este año, pero probablemente se va a pedir una prórroga para ajustar detalles hasta el próximo año.
Estudio sobre preferencias
El último sondeo que hizo el INAN fue el objetivo de comparar dos tipos de etiquetado frontal, que fue el octógono negro y una lupa. La mayoría de los participantes señalaron que el octógono negro les alertaba más sobre el alto contenido de azúcares, grasas saturadas y sodio, en comparación al modelo de la lupa.
Estos resultados son relevantes, teniendo en cuenta que otros estudios a nivel mundial mostraron mayor eficacia del octógono, en relación a otros modelos. La elección de los consumidores realizada en Paraguay coincidió con los modelos que a nivel internacional resultan más alarmantes.
Lo que tenés que saber de un fraude alimentario
El fraude alimentario consiste en cualquier acción deliberada realizada por empresas o individuos con objeto de engañar a otros en relación con la integridad de los alimentos con el objetivo de tener más ganancia, según señala la Comisión del Codex Alimentarius de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Si bien, es un requisito que el producto tenga una etiqueta nutricional para lanzar en góndola, muchas veces el paquete dice que el producto es light o bajo en grasa, entonces el consumidor ya piensa que no le va a hacer mal y es todo lo contrario.
«Muchas veces dice light pero tiene muchísima cantidad de azúcar», subrayó la tecnóloga Dalma Valeria Gonzalez.
Desde el Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN) detallaron que los tipos de fraude en alimentos pueden ser adulteración, dilución, falsificación así como declaración falsa y etiquetado incorrecto.
En este contexto, podemos decir que uno de los fraudes, el más común en nuestro país, es el etiquetado incorrecto, sobre todo porque algunas empresas al momento que solicitan su registro sanitario, presentan su etiqueta, para ser evaluada, explica la ejecutiva del INAN.
«Nosotros verificamos que cuenten con todas las notificaciones obligatorias, pero en algunos casos las etiquetas que son aprobadas en el INAN no son las mismas con las que el producto es comercializado en el mercado», acotó.
Cabe resaltar que tras otorgar el registro, este instituto puede tomar muestras del mercado, para verificar que el etiquetado coincide con lo presentado al momento del registro. Esto puede ser de oficio o a través de una denuncia presentada por el consumidor.
En ese contexto, Dalma Valeria agregó que esto también pasa con los productos gourmet, que se venden a un precio más elevado y dicen que se van a poner una carne tipo premium pero en verdad ponen una carne de no tan buena calidad y de menor precio.
Actualmente, ¿qué hay que saber sobre el etiquetado?
El consumidor a través de la etiqueta recibe mucha información que, si es bien entendida e interpretada, le ayudará a hacer una elección acertada según su preferencia e incluso de acuerdo a su situación de salud o su estado nutricional, expresó Zarza.
Asimismo, acotó que también hay que estimular al consumidor hacia la lectura de la etiqueta a través de educación y capacitación para que pueda entender la información que tiene a su alcance en el etiquetado.
Normas se extienden a productos importados
Según el código sanitario, todo producto para ser comercializado en nuestro territorio, tiene que ser registrado en el INAN. Ahí verificamos que cumplan con todos los requisitos de nuestro país, el proceso es el mismo que para los productos nacionales.
En caso de que falte algún tipo de información que es requerida en nuestro país o la información OBLIGATORIA está en un idioma diferente, se ubica una etiqueta complementaria, que es un sticker.