Los partidos y movimientos políticos no son organismos inmutables y estancos, sino todo lo contrario. Al estar compuesto de personas, las organizaciones políticas son instituciones vivas que experimentan todo tipo de cambios, generando en ocasiones incluso, una dinámica interna heterogénea, que aporta diversidad a las ideas y ejercita el músculo democrático de sus miembros.
Meses atrás, el bloque progresista del Frente Guasu, se vio dividido por la decisión institucional de a qué dupla presidencial acompañar, pese a presentar una lista única de candidatos al Senado, con Fernando Lugo a la cabeza. Jorge Querey y varios partidos y movimientos del frente acompañan a Euclides Acevedo, mientras que Esperanza Martínez preside la Concertación.
En ese sentido, existen otros partidos no tradicionales que también han tenido sus debates internos acerca de como encarar sus diferencias. Divergencias que en algunos casos son insalvables, y en otros, disimulables.
El Partido Patria Querida, se ha caracterizado durante años por ser una agrupación política sin internas duras y por actuar en base a consensos entre sus referentes.
Desde hace algún tiempo, esa imagen ha empezado a desdibujarse a partir de contradicciones y fricciones entre sus líderes, especialmente entre el senador Fidel Zavala y el diputado Sebastián Villarejo, actual presidente del partido.
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Zavala hace una crítica a la Comisión de Verdad y Justicia, que investigó la corrupción y excesos de la dictadura de Stroessner. Acto seguido, Villarejo defiende públicamente la labor de dicha comisión. Este patrón de contradicciones, se repitió en otras discusiones importantes en las que los referentes del partido no escondieron sus impresiones, sobre todo en el ámbito electoral.
Villarejo apoya activamente a la Concertación Nacional, participa en sus reuniones, se hace presente en los actos de campaña y promete su apoyo a la dupla Alegre-Núñez.
Por su parte, Zavala no solo no participa en reuniones y eventos de campaña del conglomerado de la oposición, sino que además declara abiertamente su desagrado al candidato opositor.
“Personalmente creo que Efraín Alegre pierde el foco y entrevera las cosas (…) y tiene un discurso ambiguo al decir que respeta la propiedad privada pero a la vez no apoyar la ley”, dijo a Radio Universo 970AM, días atrás.
Estas disparidades de actitudes y posturas, también tienen eco en las redes sociales, donde simpatizantes de Patria Querida, manifiestan su inclinación a favor y en contra de estos liderazgos.
Lo que dicen los patriaqueridistas
Consultamos con varios referentes del partido para que compartan su parecer acerca de estas divergencias internas que algunos califican de fractura institucional, sin embargo desde este partido tienden a ser conciliadores y minimizar las diferencias.
El senador Zavala, en medio de una gira por el departamento de San Pedro, respondió escuetamente a una consulta telefónica de Latitud 25, y aseguró que, en relación a estas diferencias: “Creo que la prensa magnificó esto”.
El senador resalta que los parlamentarios patriaqueridistas, tanto en la Cámara de Senadores como en la de Diputados, siempre votan en el mismo sentido, como demostrando que no existe tal grieta partidaria ni facciones internas dentro de su partido.
Por su parte, el diputado Villarejo, a pesar de ser a quien se toma como punto de contraste con Fidel Zavala, en sus diferentes declaraciones públicas ha preferido no confrontar con sus correligionarios.
Ante las consultas realizadas por diferentes medios acerca de sus diferencias con las posiciones de Zavala, el mismo se ha limitado a afirmar que su partido es tolerante, democrático, y que se respetan las opiniones personales.
“Dos tendencias”
El concejal de Asunción, Pablo Callizo, si bien no quiso dar mayor importancia al tema, sí reconoció que en Patria Querida existen dos “tendencias”.
Consultado acerca de cómo llamaría o identificaría a estas dos tendencias, aseguró que quizás una podría denominarse como “institucionalista”, mientras que otra (la que actualmente no acompaña a la Concertación) sería la tendencia “disidente”.
“No me parece que gente que no esté de acuerdo con la postura institucional, salga a contradecir lo que el partido ya decidió en su momento por mayoría, sea quien sea la persona, creo que no corresponde”, manifestó el concejal.
La diputada por Central y actual candidata a diputada por Asunción, Rocío Vallejo, brinda una opinión muy similar a la que repite Villarejo, limitando tales diferencias como normales dentro de un partido político.
“En el partido yo realmente no creo que exista tal quiebre, existen posturas diferentes como en cualquier nucleación democrática”.
Vallejo se adhiere a la postura oficial del partido, asegurando que el mismo firmó un compromiso dentro de la Concertación y que se debe acompañar al ganador de la interna, pues de debe honrar el compromiso institucional asumido por Patria Querida.
Una mirada desde afuera
Para el politólogo especialista en partidos políticos y procesos electorales, Camilo Filártiga, un punto de tensión sería el rechazo público a la llamada “Ley Riera – Zavala”, manifestado por Efraín Alegre. Para Fidel Zavala, impulsor de esta ley que aumenta la pena por invasión de tierras, esta diferencia sería un impedimento para acompañar a la dupla concertacionista.
“Fidel al día siguiente de lo de las tierras malhabidas, sale a decir que no va a acompañar a la concertación”, recuerda Filártiga.
Otra brecha, según el politólogo, sería la generacional. Hay un ala más joven del partido, en la cual se inserta el liderazgo de Villarejo. Muchos de los cuadros más jóvenes se criaron en democracia y tienen una visión distinta.
La generación mayor, en cambio, tendría una visión más conservadora. El entrevistado hace la aclaración de que estas tendencias admiten excepciones. Por ejemplo, identifica al senador Stephan Rasmussen como más cercano al grupo de Zavala, a pesar de que pertenece a la misma generación joven de Villarejo.
Concluye afirmando que “el disenso es natural en democracia”, y que administrar esas tensiones, será uno de los principales próximos desafíos del Partido Patria Querida.