La vacunación en nuestro país avanza lentamente. Si bien el personal de salud fue el primer grupo en recibir las vacunas contra el COVID-19, todavía no se llegó al 100% de este sector. Esto se debe a que muchos profesionales deben esperar un tiempo, luego de haber tenido la enfermedad, para poder recibir recibir las respectivas dosis.
Al respecto, el viceministro de Atención Integral a la Salud y el Bienestar del Ministerio, Hernán Martínez, dijo en comunicación con RadioCast25 que el 87% del personal de Salud ya recibió dos dosis de la vacuna contra el coronavirus. En ese sentido, confirmó que esto ya está influyendo directamente en que se produzcan menos casos graves del cuadro viral en el personal de blanco.
“Incluso la presidenta de la Asociación Paraguaya de Enfermería vio una disminución muy importante en la internación del personal de blanco, tras la aplicación de la vacuna”, resaltó.
Agregó que efectivamente, esta inoculación redujo la cantidad de funcionarios de la salud internados y aseguró que es un hecho auditable.
“La vacuna no es peligrosa, al contrario puede hacer que hoy yo no esté ocupando una cama en terapia intensiva”, insistió. Dijo además que esto puede hacer que caigan todos los mitos que rondan a la vacuna y que buscan desalentar que la gente se inmunice.
En ese contexto, el director de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, hoy en conferencia de prensa, señaló con gráficas cómo progresivamente fueron disminuyendo los casos graves de COVID-19 en el personal de salud, después de haber recibido la segunda dosis y que haya pasado dos o tres semanas de esa aplicación.
¿Qué pasón con los fallidos a pesar de tener dos dosis?
Sequera insistió en que se requiere esperar al menos 15 a 21 días después de la segunda dosis, para estar seguro de que uno está con las defensas con plenitud, para enfrentar el virus.
“Escuché mucho en los medios. Es cierto, hay fallecidos que tienen las dos dosis, es cierto; tenemos dos personales de salud que tienen las dos dosis”, aseveró.
No obstante, explicó que revisando estos dos casos vieron, que uno de ellos ya tenía la enfermedad el día en que recibió la segunda dosis, y el otro caso, dio positivo al día siguiente. “Es decir, tenían las dos dosis pero esa segunda dosis todavía no había generado las defensas correspondientes para esas personas”, puntualizó.
Por otra parte, el director del PAI, Dr. Héctor Castro insistió en que, mañana sábado 19 de junio, dedicarán a realizar una vacunación exclusiva para embarazadas (mayores de 18 años y que tengan al menos 20 semanas de gestación), atendiendo que en los últimos meses se registró un elevado número de fallecimientos de mujeres embarazadas.
Hasta el momento, ya hay unas 16.000 embarazadas registradas para la vacunación de este sábado 18 de junio.
Asimismo se amplía el rango etario de vacunación anticovid, para los nacidos hasta 1969, es decir que tengan 52 años de edad o lo cumplan este año. La vacunación se hará por terminación de número de cédula.
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Requerimiento de oxígeno aumentó en un 700%
En cuanto a los requerimientos en el sistema de Salud, el viceministro Martínez afirmó que desde el inicio de la pandemia, el porcentaje de la utilización del oxígeno trepó al 700% en relación a las necesidades de antes.
Si bien, en algunos momentos hubo escasez de oxígeno por esta sobrecarga de pacientes, actualmente la planta de Acepar, que está produciendo el gas vital, está ayudando a cumplir con la demanda de los hospitales. “Con Acepar estamos teniendo un alivio principalmente en Concepción”, explicó.
Asimismo, comentó que está esperando un cargamento de oxígeno que proviene de Brasil y remarcó una vez más que la única manera de cubrir esta necesidad es que cada hospital tenga su planta productora de oxígeno, sin embargo, reconoció que todavía falta un tiempo para que esto se pueda concretar.
Hospitales colapsados y casi sin capacidad de crecimiento
En ese contexto, cabe resaltar que los hospitales, a la fecha, se encuentran abarrotados de pacientes con COVID-19, tanto en sala común como en la unidad de terapia intensiva. Al respecto, el doctor Hernán Martínez sostuvo que todavía hay capacidad de ampliar las camas en UTI, pero no muchas.
Como máximo, sostuvo, se pueden agregar otras 50 camas en todo el país. Aclaró que no se trata de falta de equipamientos, sino a estas alturas, ya no hay profesionales especializados en terapia intensiva.
“El paciente con covid es muy complejo y muchos de ellos van al respirador artificial, como mínimo necesitamos un especialista en terapia intensiva para habilitar ocho camas y no hay más”, concluyó.
