La cuestionada ley 6659 “Que aprueba el convenio de financiación entre la Unión Europea y la República del Paraguay para el Programa de Apoyo a la Transformación del sistema educativo en Paraguay y sus anexos”, había sido aprobada por el Congreso de la Nación en el 2018. En la Cámara de Diputados, había sido aprobada por mayoría.
Y esa mayoría en la Cámara Baja ha sido constante a favor del Partido Colorado, específicamente de Honor Colorado, movimiento interno que hoy funge de oficialismo.
El hecho de preservar la soberanía de una nación y cuidar las cooperaciones internacionales condicionadas, nunca será cuestionable, pero sí cuando actores políticos utilizan la desinformación como herramienta electoral y pretenden avasallar con esto, los procedimientos constitucionales.
Como sucedió con la discusión sobre la inclusión o no de la perspectiva de género, un “cuco” inventado por el sector ultra conservador de la Asociación Nacional Republicana (ANR) al que llamaron “ideología de género” para antagonizar la población en base al miedo y concentrar los votos duros, en las pasadas elecciones generales.
En caso de querer modificar alguna cuestión establecida en el convenio, el mismo tratado incluye los mecanismos para realizar estas acciones, que giran en torno a las diligencias diplomáticas, que recaen bajo la disposición de la Cancillería Nacional.

Así debería tratarse
En conversación con L25, Juan Andrés Cardozo, director general de la Academia Diplomática, dependiente de la Cancillería Nacional, detalló algunos de los pasos que deben tomarse para realizar cambios en este o cualquier tipo de convenio de cooperación con organismos internacionales.
Sus comentarios no representan una opinión política sobre la discusión que atrae la atención pública actual.
“Todo tratado tiene un punto final donde se establece cómo se dejaría de tener vigencia y se llama la denuncia. Y esa denuncia lo realiza el Estado o parte del convenio, del acuerdo, del tratado dentro de un proceso de negociación. Eso en todo acuerdo está establecido” explicó.
En el caso de la ley 6659, el mismo acuerdo en su cláusula número 25, titulada “Modificación del presente convenio de financiación”, detalla los pasos a realizarse para gestionar los cambios que el socio considere pertinente. Entiéndase como “socio” a Paraguay.
En esta línea, Cardozo explicó que es la Cancillería, la que ejecuta los cambios o mejoras sugeridas por el socio.
“Es la Cancillería la que opera, ejecuta y hace las conversaciones pertinentes. Y se llama a un proceso de negociación destinado a desactivar el tratado o a modificar, ampliar y por lo general en los mismos acuerdos se establecen fechas posibles en que se puede renovar el acuerdo o mejorar», aclaró.
También recalcó que, en estas situaciones, el trato diplomático es el que prevalece, para preservar las relaciones que Paraguay posee con todas las representaciones de naciones que desarrolla nuestro país.
Honor Colorado, finalmente reculó en su plan de derogar el presente acuerdo. Para que dicho plan se materialice, el Senado debe aprobar dicha derogación, intención que ahora está en duda por parte del movimiento Honor Colorado.
Sea cual fuere la decisión final del Poder Legislativo, las tareas finalmente pasan por las manos de la diplomacia paraguaya.
“Tiene que haber conversaciones entre las partes y esas conversaciones deben ir en un previo acuerdo. Y ese previo acuerdo pasa por la dirección de asuntos legales y luego por la dirección de tratados. Todo tiene un proceso”, contó Juan Andrés Cardozo.
Casos extremos
El experto en diplomacia también dijo que no existen precedentes sobre casos de cooperación internacional que se hayan mediatizado a este nivel. Contó que para casos extremos, en donde ambas partes del convenio no lleguen a un acuerdo, cualquiera de los dos pueden recurrir a la denuncia, un procedimiento establecido en los quehaceres diplomáticos.
“En el caso que estamos hablando es de manera bilateral. O sea que tanto Paraguay si querría presentar alguna denuncia o la Unión Europea… Paraguay tiene que comunicar a la Unión Europea y tiene que empezar a negociar las posibilidades de lograr su propósito”, expresó.
Considerando esta ley, el artículo 28, dispone los parámetros para la resolución de controversias. Dicha cláusula, indica que en el caso de un problema que no se haya podido solucionar en un plazo de seis meses, ambas partes recurrirán a un arbitraje.
Retrocediendo en sus pasos
Las bancadas colorada y liberal de Honor Colorado, dieron una conferencia de prensa el pasado lunes, en la que junto al canciller, Rubén Ramírez Lezcano, dieron aviso de que finalmente no cierran líneas para trabajar por los votos y lograr la derogación del convenio con la Unión Europea.
“Nosotros tenemos que ser cumplidores y hacer cumplir los convenios internacionales. La realidad es que Paraguay no puede poner en riesgo el cumplimiento de acuerdos y tratados internacionales”, dijo en la ronda de prensa el Canciller Nacional.

A su turno el senador colorado cartista, Basilio “Bachi” Núñez, afirmó que se reafirma en su posición de haber presentado el proyecto pero que ahora, como por acto de revelación, miran “con otros ojos” dicho tratado.
“No me arrepiento ni un milímetro de haber presentado (el proyecto de derogación). ¿Por qué? Porque si no, no íbamos a tener este tipo de reunión. Ahora tenemos a un vicepresidente presente, a ministros presentes, que es lo que debía haber pasado en el periodo anterior y hasta no hubiésemos derogado”, manifestó.
De esta forma, el oficialismo baja los decibeles en este tema, pese a que el presidente Santiago Peña, había manifestado que acompañaría la derogación, en caso de que se apruebe dicha intención en el Senado.
El primer mandatario fue abordado el martes último sobre la posición de su movimiento interno y eludió las preguntas incómodas sobre el tema asegurando que apostaría por el diálogo para saldar esta situación y que no creía que se estaba pisando el compromiso asumido en campaña.
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Las repercusiones
La exsenadora Desirée Masi, lamentó el actuar del oficialismo, y calificó a la situación como un “papelón”. Sostuvo que manipularon a grupos de padres desinformando con la supuesta “ideología de género” con fines electorales.
“Están jugando con definiciones metiendo y basta ya de este papelón nacional e internacional. Violan el ordenamiento jurídico y se les dijo de un principio. Yo lamento las expresiones del Canciller Rubén Ramírez, un funcionario de carrera. Sabe perfectamente que la derogación no es el camino legal”, dijo en contacto con la 1080 AM.

Por su parte la senadora Kattya González (PEN) dijo que el repentino cambio de postura de Honor Colorado, representa un retroceso enorme ante su “propia ignorancia e incompetencia”.
“Si es que se premiara la máscara de la caradurez, el carnaval político, los del movimiento de Honor Colorado ya tendrían un Óscar a la Mejor Película”, dijo en la 1080 AM.
Y también afirmó que la “soberbia les jugó una mala pasada” al oficialismo, ya que el Poder Legislativo no tiene la competencia o autoridad para derogar un acuerdo que cuenta con jerarquía de tratado internacional.