Las mujeres durante el embarazo pasan por una serie de cambios hormonales y físicos, pero además, luego de dar a luz también se exponen a consecuencias que no se pueden controlar en relación a la salud mental de las madres restantes.
En este caso, hablamos de que la depresión posparto afecta aproximadamente hasta al 20% de todas las madres y lo más llamativo es que esta condición puede manifestarse tres a cuatro semanas después del nacimiento o incluso hasta un año después.
El psiquiatra Julio César Torales, del Hospital de Clínicas, cuenta que existen casos en los que el bebé puede llegar a cumplir un año y la afectación recién se da en la madre con la depresión posparto, condición que puede llegar a ser muy grave.
No obstante, el especialista hizo mucho énfasis en que esta condición no es culpa de la mujer. «No podés culpar a alguien por tener una enfermedad, es como culpar a alguien por tener hipertensión», resaltó.
Tristeza posparto no es lo mismo que depresión
El psiquiatra habló de la necesidad primero de diferenciar entre la tristeza posparto y la depresión posparto. Señaló que esta primera se presenta hasta en el 80% de las mujeres.
«Es hasta normal que una mujer se sienta triste después de dar a luz. Esta tristeza se produce en las dos primeras semanas, pero la funcionalidad y la relación del recién nacido con la mamá es casi normal, casi no hay alteración y no hay ideas suicidas presentes», expresó.
En cambio, en cuanto a la depresión posparto, indicó que existe una disfunción en la rutina de la madre y también hay alteración en el relacionamiento con el bebé, porque ella no se siente en condiciones de cuidar al niño.
«Esa depresión posparto se acompaña con tristeza, pero es una tristeza que se siente durante la mayor parte del día, casi todos los días, se acompaña la anhedonia –la incapacidad de sentir placer con cosas que le daban antes placer a uno–, fatiga, cambian los patrones del sueño –con insomnio principalmente–, hay cambios en el peso corporal, disminución de la concentración, sentimientos de culpa o inutilidad, ideación suicida o pasiva de muerte e incluso ideación de dañar al bebé», detalló.
Agregó que el bebé puede ser afectado porque se puede dar un mal cuidado y además va a sufrir un desapego emocional y físico de la madre.
Condiciones que generan predisposición para la depresión
En ese contexto, hay que resaltar que hay factores que influyen a desarrollar esta condición en personas que están biológicamente predispuestas. Estos factores pueden ser embarazos complicados, no deseados y no planificados, así como problemas económicos.
También puede guardar relación con una familia que no apoya a la mujer, problemas de pareja o el hecho de haber sido víctima de abuso o de violencia intrafamiliar.
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«Por eso es importante, que el embarazo haya sido planificado, que haya sido contenido, que la pareja se involucre en esto, entonces muchas de las dificultades que las mujeres atraviesan durante el embarazo, hacen que la mujer pueda desarrollar depresión posparto», puntualizó.
Tiene cura, pero el diagnóstico debe ser inmediato
El doctor Julio Torales señaló que, si una persona nota que tiene estos síntomas o que alguien de su entorno está pasando por una situación así, debe acudir a un psicólogo o psiquiatra. «El diagnóstico tiene que ser rápido, hay que hacer las diferenciaciones», subrayó.
Explicó que el tratamiento puede ser psicoterapéutico, en caso de episodios leves o farmacológico, para los más intensos. «La depresión posparto se puede curar; hay muy buena evidencia de eso, por eso es importante hacer el tratamiento», enfatizó.
En ese contexto, recordó que en el Hospital de Clínicas realizan atenciones gratuitas en el área de salud mental para las madres o mujeres embarazadas. Para sacar turno, hay que llamar al 0992 782 394, de lunes a viernes, de 8:00 a 10:00.
