Con frecuencia el rédito económico de un emprendimiento se percibe como un interés opuesto al cuidado del medioambiente. Sin embargo, la convergencia de ambos intereses es cada vez más apreciada, a causa de la crisis climática ya existente. Existen esfuerzos de todo tipo que buscan avances en la economía pero con criterios de conservación del medioambiente, una de ellas es la Moneda Digital del Banco Central Verde –por sus siglas en inglés Green CBDC–.
Esto podría llegar a generar una enorme oportunidad para Paraguay, dado a su condición de país agroexportador, al considerar que mercados multimillonarios como el cárnico de Europa, están anteponiendo criterios de sustentabilidad en la importación de sus productos, como por ejemplo la trazabilidad de la carne, para garantizar la reducción del impacto ambiental del negocio.
El campo de la energía limpia no es la excepción, existe un enorme potencial para expandir el alcance de las bondades de los recursos energéticos de Paraguay, logrando que ese incremento repercuta positivamente en la economía.
Los ingenieros Christian Meyer y Jesús Ramón Jaimes, realizaron una investigación en la que apuntan a cómo Paraguay puede mejorar sus reservas internacionales basándose en el potencial de la energía verde que se puede producir en nuestro país anualmente.
Para entender esta iniciativa, es necesario recordar que la reserva internacional es algo con lo que cuentan los bancos centrales de los distintos países, que sirven para equilibrar sus respectivas economías y hacer, por ejemplo, intervenciones oportunas que logren disminuir la inflación o la disparada de la cotización del dólar.
Monedas Digitales no son Criptomonedas
Actualmente, las reservas internacionales de Paraguay están respaldadas en dólares, lo que, a la fecha, se encuentra en un poco más de USD 9.300 millones.
Según lo que explica el Ing. Christian Meyer, cuando hablamos de monedas digitales, no estamos haciendo referencia a criptomonedas o bitcoins sino que estamos haciendo alusión al Guaraní, pero no en formato físico, es decir, será en una versión digital.
En ese punto, remarca la idea de que a través de esta propuesta Paraguay pueda generar esas monedas digitales con un respaldo, no en dólares o en oro –como se hace actualmente–, sino a partir de la generación de energía verde.
“La moneda acuñada a la capacidad de producir energía eléctrica renovable estimada en Megavatios o Gigavatios por hora por año de países ofrecería una solución de oferta global, ya que todos los países necesitan cambiar a energías renovables, y la creación del dinero sería el estímulo adecuado, que al mismo tiempo ofrecería un estándar para CBDC, así como un sistema que podría ser fácilmente verificable frente a los problemas”, señala el estudio.
Entonces, lo que se hace es analizar cuánta energía verde tiene cada país. En el caso del nuestro, Meyer refirió que la generación de energía hidráulica actual de Paraguay estaría alrededor de 60.000 GW hora por año. Un (1) GW hora por año equivaldría a un millón de dólares, por lo que esta operación podría multiplicar seis veces la actual reserva internacional que ronda los USD 10.000 millones.
Hay potencial para igualar a hidroeléctricas
El Ing. Christian Meyer resalta que en varios puntos del país existen grandes plantaciones de al menos 30.000 hectáreas de yerba mate. Agregó que si esa extensión se llega a utilizar para instalar paneles solares se puede generar anualmente los 60.000 GW de energía.
En ese espacio, subrayó que la cantidad de energía producida puede igualar a la que elaboran las tres centrales hidroeléctricas en la actualidad (Itaipú, Yacyretá y Acaray).
Una salida verde, y muy rentable
El estudio señala un total de seis puntos o razonamientos que se deben considerar para que esta moneda digital se produzca y maneje de manera segura y confiable. Entre ellos, citamos, dos.
Uno de los enunciados, por ejemplo, habla de que para evitar la inflación y el populismo, “el dinero generado por la producción de las energías renovables deben introducirse en la economía en intervalos de cinco años, lo que coincide con la duración de la mayoría de los mandatos presidenciales alrededor del mundo”.
El otro eje, habla de qué tipo de energías serán consideradas para la producción de estas monedas.
“La construcción de centrales eléctricas deben respetar los derechos humanos, así como evitar impacto ambiental negativo. En cumplimiento del razonamiento, se propone que la nueva moneda esté respaldada por la capacidad del país para producir energía no dañina. Para esta moneda, solo energía renovable que proviene de la hidroelectricidad, energía eólica, energía solar, energía geotérmica o nuevas fuentes que no afecten negativamente a nuestro entorno”, puntualiza el material.
Paraguay sigue modernizando su sistema y camina hacia la moneda digital
El estudio afirma que la Moneda Digital del Banco Central debe ser como el dinero regular y que debe estar disponible todo el tiempo para todas las personas, pero medido en otro tipo de cuenta o de una manera diferente del dinero ordinario.
En ese contexto, cabe resaltar, que recientemente, el gerente general del Banco Central del Paraguay, Holger Insfrán, habló en RadioCast25 de la importancia de las transferencias interbancarias en guaraníes, durante las 24 horas y los siete días de la semana.
“Nosotros somos conscientes de que nosotros tenemos que ir incrementando la digitalización, porque eso lleva de alguna manera a la inclusión financiera y mientras mayor digitalización financiera tengamos, también vamos a tener mayor impacto en la política monetaria, ni qué decir de los desafíos que vienen para los bancos centrales de aquí a poco –ya habrás escuchado sobre la moneda digital en los bancos centrales–, entonces no podemos pasar a una etapa siguiente si somos una economía poco digitalizada”, manifestó.
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