Desde su imputación el viernes pasado, por supuestos delitos de lavado de dinero y asociación criminal, el diputado cartista Erico Galeano, desafió a su propio equipo político a que lo apoyen. Galeano puso a prueba el liderazgo del presidente electo Santiago Peña, quien el viernes último solicitó públicamente, que el parlamentario se ponga a disposición del Ministerio Público.
En conferencia de prensa esta mañana, desde su residencia en Capiatá, Galeano hizo un descargo que no cayó bien en el entorno de Horacio Cartes. Aseguró tener «doble inmunidad» por ser diputado y senador electo, y que por este motivo «es inimputable» por el Ministerio Público.
Galeano además aseguró que es víctima de una «persecución política inmisericorde» y que la Fiscalía está cometiendo una «atrocidad jurídica» al solicitar su prisión preventiva.
«Estamos dentro de una persecución política inmisericorde hacia mi persona en donde se tratan cosas inverosímiles a partir de la venta de un inmueble», dijo Galeano haciendo referencia a la propiedad que tenía en el complejo urbanístico Aqua Village, en la localidad de Altos.
Por este terreno, Galeano pagó USD 200.000 en 2013, y lo vendió en 2020 por USD 1 millón a Hugo Manuel González Ramos, presunto miembro de una red de narcotráfico internacional de la que formarían parte Sebastián Marset y el clan Insfrán. La fiscalía también cuenta con evidencia de que estas personas utilizaron varias veces la avioneta de Erico para sus operaciones.
Sobre este punto, Galeano se excusó diciendo que utilizaba su aeronave como taxi aéreo y que todos los puntos donde ésta operaba, eran controlados.
«Mi piloto Diego Quiróz, me habló de la posibilidad de hacer taxi aéreo, y consecuentemente se hacían taxis aéreos en mi aeronave. Los puntos en los que se hacían estos taxis aéreos eran Asunción – Ciudad del Este, Asunción – Encarnación, Asunción – Saltos del Guairá, osea aeropuertos controlados», dijo.
La «persecución inmisericorde»
Erico Galeano tiene una confrontación abierta con el senador colorado y otrora cercano Derlis Osorio, a quien atribuye la autoría de la persecución política que derivó en la imputación, por una supuesta deuda de Gs. 1.200 millones en enero de 2021, para «fines de campaña», que Osorio nunca pagó.
Por su parte, el oficialista Derlis Osorio, negó rotundamente que exista tal deuda y dijo que Erico pretende aferrarse a sus fueros utilizando la política.
“Nunca existió tal préstamo de G. 1.200 millones en enero del año pasado. Él estaba en el movimiento por Honor Colorado como candidato a gobernador, cuando todavía no había explotado A Ultranza. Yo era candidato a senador por Fuerza Republicana. Es medio extraño que dos personas enfrentadas en un departamento, el adversario directo, me tenga que financiar la campaña. Es totalmente absurdo”, dijo el senador.
Galeano incluso mostró un pagaré firmado por Osorio, a modo a respaldar su versión de la deuda.
Estirón de oreja
Las declaraciones de Erico trajeron cola en su propio equipo político, y generó una confrontación de intereses entre dos personas muy cercanas a Horacio Cartes, Galeano y Peña. Este último, ya marcó anticipadamente, la línea política de acompañar el desafuero.
En este sentido, Galeano aseguró esta mañana, que aun no existe una postura tomada de la bancada de Honor Colorado, en relación a acompañar el pedido de desafuero. Esto habría incomodado a miembros de la bancada cartista, por la tensión que se genera al poner en duda la postura del presidente electo Santiago Peña.
Ante esto, la bancada liderada por Pedro Alliana y Basilio Núñez, salió al paso a confirmar que efectivamente acompañarán el desafuero. Esta decisión se dio tras una reunión con Galeano, en la que según trascendió, le habrían convencido de que se ponga a disposición de los investigadores sin condicionamientos.
Sin embargo, algunos cartistas «rebeldes» como el diputado Ulises Quintana, también procesado por lavado de dinero y asociación criminal, defendió a su colega Galeano y dijo que «no es el tiempo político» indicado para que se de esta pérdida de fueros.
«Vamos a darle las garantías necesarias que él tiene como legislador, para que pueda defenderse y jurar como senador», dijo Quintana.
El diputado procesado por los mismos tipos penales que Galeano y que pasó dos años en prisión, restó importancia a la postura de Santiago Peña, destacando que Peña «no es la Justicia y no hace parte del Poder Legislativo».
Desafuero por unanimidad
Otra de las instancias políticas que debía determinar el acompañamiento del retiro de fueros de Erico Galeano, era la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, que hoy también decidió por unanimidad acompañar la medida, atendiendo a los elementos presentados por el Ministerio Público en su requerimiento.
La diputada Rocío Vallejo, contó que los cartistas que forman parte de esta comisión no han asistido a la sesión, por lo que los presentes determinaron dar el OK para que el dictamen emanado de esta comisión sea favorable a lo solicitado tanto por el Ministerio Público, como también por el presidente electo.
«Tampoco se puede decir que existe una persecución política, consideramos que los hechos descriptos en la imputación fiscal reúne los parámetros de sospecha, que es lo que se requiere al momento de una imputación, por lo tanto deslindamos esas opiniones relativas a que esto es una persecución política», dijo Vallejo.
Vallejo, abogada penalista y ex fiscal de delitos económicos, respondió a la premisa jurídica del «doble fuero» alegado por Erico Galeano, en base a un «análisis párrafo por párrafo de la Constitución Nacional».
«La inmunidad corresponde a las opiniones vertidas en el ejercicio de nuestras funciones, yo tengo entendido que él todavía no está en función de senador», ironizó Vallejo.