La sanción financiera al expresidente Horacio Cartes (Titular de la ANR), por parte del gobierno de los Estados Unidos, es una bomba expansiva. A pesar de que ya se dio a conocer el pasado 26 de enero, hasta la fecha, sigue generando efectos en diferentes segmentos en el plano económico.
Ayer se supo que Cartes tomó la decisión de apartarse del conglomerado de empresas, determinación a la que llegó siguiendo la recomendación de sus asesores, para evitar que se profundicen las complicaciones en las operaciones de sus compañías.
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Pero mucho se especuló en redes, sobre qué pasaría con el Partido Colorado, sabiendo que HC, su recientemente electo presidente, se encuentra con una imposibilidad de realizar transacciones en dólares. Por consiguiente, se habló de la posibilidad de que las instituciones de las que es titular, tampoco podrán hacerlo en igual medida.
Incluso, en Twitter fue tendencia durante gran parte del día, la serie de memes que ironizaban sobre la supuesta venta de acciones de las empresas de HC a él mismo pero cambiando de identidades.
Significativamente embretado
El panorama se complica cuando la ANR debe recurrir a un préstamo de G. 40.000 millones. Este dinero es necesario para afrontar los gastos de campaña de las candidaturas a presidente, legislativas, gobernaciones y juntas departamentales. De acuerdo a lo que establecen los estatutos partidarios, son el presidente y el tesorero quienes deben solicitar y firmar todos los créditos que asuma la institución.
La discusión gira en torno a si Cartes puede delegar o no esta responsabilidad administrativa al vicepresidente primero de la ANR, Juan Carlos Galaverna. Sin embargo, para que esto se dé, se debe llamar a una convención para cambiar los estatutos. Para llamar a una convención partidaria, se debe convocar 30 días antes.
Entre los 30 días para la convención, más el plazo de tiempo para el análisis financiero previo a la concesión del crédito, es altamente probable que el tiempo no sea suficiente antes de las elecciones del 30 de abril próximo.
Sin bancos, no hay crédito
Según el dirigente colorado Mauricio Espínola, asesor político del Presidente Mario Abdo Benítez, el tiempo corre y es probable que las cosas se compliquen para el partido al momento de hacer frente a los gastos de campaña.
«Hoy ya quedan 87 días. ¿Qué entidad bancaria te va a otorgar un crédito con toda la coyuntura que está viviendo el actual presidente del partido?», se pregunta Espínola.
Asegura que la disidencia colorada, liderada por el presidente de la República, no está impulsando la renuncia de Cartes. No obstante, considera necesario que la dirigencia de la Junta de Gobierno tome medidas preventivas a un hecho que parece ser inminente.
Recuerda que para acceder al préstamo, el tesorero del partido, el diputado Tadeo Rojas, ex ministro del Interior del gobierno Cartes, debe acompañar al titular del partido. Sin embargo, el mismo no puede figurar solo en la documentación presentada.
La ANR no trabaja con BASA
El vicepresidente segundo de la ANR, Rodolfo Friedmann, reconoce que la preocupación existe en la cúpula partidaria. Confirma que ya se solicitó un dictamen técnico al equipo jurídico del partido para determinar hasta qué punto las sanciones al presidente colorado podrían afectar el desempeño de la entidad a su cargo.
«En teoría, los problemas de Cartes son con el sistema financiero norteamericano, hasta donde yo sé. El departamento jurídico está viendo si él puede firmar o no, y en base a eso se hará una hoja de ruta jurídica en los próximos días», dice Friedmann.
Ante la duda de si el banco del Grupo Cartes, Banco BASA, pueda ser el emisor del crédito de 40.000 millones de guaraníes que ya fue aprobado por la alta dirigencia colorada, Friedmann confirmó que el partido no trabaja con BASA pero que desconoce si este banco estará disponible a servir como emisor del préstamo que precisa el partido.
«Es una cuestión legal, si no hay ningún impedimento legal, no tendríamos que tener ningún problema con ningún banco», concluye Friedmann.