Paraguay atraviesa grandes desafíos en materia económica, luego de haber sorteado dificultosamente los embates de la pandemia y la escalada de precios internacionales que deriva de la guerra que prosigue y recrudece en el este de Europa entre Ucrania y Rusia.
Pero entre las amenazas latentes en el plano económico solo se destacan factores externos, ya que existe uno en particular que puede desestabilizar las arcas públicas para el 2023, un año de recuperación económica en el que se debe ser racional con el uso del dinero estatal y riguroso en la calidad del gasto público.
La presión política de los bloques de poder para intervenir la estructura del PGN y poder incrementar sus presupuestos, puede poner en jaque las finanzas del Paraguay, ya que según fuentes oficiales estos aumentos ascenderían a los USD 3.000 millones.
En este sentido, quien debe administrar no sólo las arcas públicas, sino además la intensa presión política, es el ministro de Hacienda, Óscar Llamosas, quien habló con RadioCast25, sobre lo que puede pasar si se aprueban las ampliaciones solicitadas por instituciones como IPS, ANDE, Ministerio del Interior y el Ministerio de Defensa Pública.
Por ejemplo, el IPS, pidió una ampliación de más de G. 48.000 millones, mientras que la Defensoría Pública pidió en el Congreso, un aumento de al menos G. 55.000 millones.
Se pueden generar falsas expectativas o no tener financiamiento
El titular de Hacienda, resaltó que al presentar el PNG2023, con un presupuesto de USD 14.454 millones, trataron de atender las prioridades más urgentes, que tienen que ver con la salud, educación y seguridad.
Sin embargo, reconoció que los números son insuficientes. «Recibimos pedidos de aumentos por más de USD 3.000 millones», indicó.
En ese contexto, manifestó que si hay alguna necesidad, o una aprobación por parte del Congreso de aportar gastos adicionales de lo enviado por el Ejecutivo, es el Parlamento el que tendrá que ver cómo financiarlos.
No obstante, hizo énfasis en que no tiene sentido que en el presupuesto se incorporen gastos rígidos, como aumentos en sueldos de funcionarios.
«Ahí pueden ocurrir dos cosas: uno que estamos generando una falsa expectativa incorporando gastos, que al final del día, no van a tener financiamiento. O puede ser más grave, si esos gastos que se incorporan son gastos rígidos; como aumento de salarios, lo que va a ocurrir –el año que viene– es que el Estado se va a pasar todo el año pagando esos recursos y no va a tener dinero para pagar otras políticas que son importantes», advirtió.
Gastos rígidos ya superan el 90%
En cuanto a los gastos rígidos, recordó que esos son pagados normalmente con la recaudación de impuestos. «Los gastos rígidos superan el 90%», afirmó y acotó, que en la medida en que vamos cargando gastos rígidos al presupuesto, los recursos van a ser insuficientes.
Incluso, recordó que, ya este año hay varias leyes aprobadas por el Congreso que agregan mayor rigidez al presupuesto actual y eso se va a trasladar al año que viene. «Estamos hablando de cerca de G. 30.000 millones más, para este año», indicó.
En cuanto a esos ingresos, aseguró que hay un esfuerzo que se está haciendo por el tema de la formalización.
«Hay muchas cuestiones que recién se están implementando este año, a través de la nueva ley tributaria, debido a la pandemia, pero claramente las cuestiones que se discuten en el Congreso superan estos montos», enfatizó.
Asimismo, el ministro Llamosas dijo que están tratando de sensibilizar a la ciudadanía sobre lo grave que puede ser esto, porque es la que al final va a tener que pagar.
«Es importante que la ciudadanía se involucre mucho más en estas cuestiones, al final la ciudadanía va a pagar todas estas ampliaciones en vez de destinar recursos a salud y educación –donde todavía hay mucha deficiencia–, estamos destinando a pagar más salario a funcionarios que ya están recibiendo un salario mensual y seguro. Mientras, más del 70% de la población se tiene que administrar a través de trabajos informales y por cuenta propia de sus negocios para llegar a fin de mes, es injusto», declaró.
Proyectos para mejorar el gasto público siguen durmiendo
El titular de Hacienda remarcó, algo de lo cual se viene hablando hace mucho tiempo, pero sin acciones concretas.
Dijo que hay espacio para mejoras en el gasto público, para que el Estado sea mucho más eficiente, gaste menos y mejor. Lamentó que las iniciativas que están en el Congreso para hacer más eficiente el sistema, no avanzaron.
«Hemos presentado una propuesta de Ley del Servicio Civil que va a determinar cómo se remunera al funcionario público y todas estas discusiones que generalmente se dan en años electorales», acotó.
Asimismo, dijo que es mucho más fácil aprobar ampliaciones y seguir tirándole el peso Ejecutivo, pero insistió en que esto va a explotar, en algún momento. «Estamos saliendo de una situación complicada, entonces meter más presión al presupuesto público en materia de gasto sin contrapartida de financiamiento público es muy peligroso», aseveró.
Podemos tener una crisis como la del 2002, por beneficiar a un grupo de gente
El ministro, dijo además, que esta alerta no se basa en ninguna ciencia ficción, porque si nos remontamos hacia atrás, podemos ver lo que ocurrió en 2002.
«El gobierno entró en cesación de pago, los salarios con atrasos, las jubilaciones con atrasos y se dejó de pagar la deuda. Es remontarse en el tiempo y ver qué puede pasar, queriendo congraciarnos con un grupo de gente, afectando a la ciudadanía y a todo el país con todos los avances que hicimos», alertó.
Ante los cuestionamientos hacia Hacienda, ante la actual crisis económica, respondió que la coyuntura de alza de precios tiene una explicación.
En ese punto, resaltó la pandemia, la guerra en Ucrania y la inflación regional. «Si uno mira los indicadores, uno ve que Paraguay fue el país fue el menos afectado. En una región donde, en 2020, la economía cayó un 7% en los países de la región y Paraguay cayó 1,5%», ejemplificó.
«Es cierto que hay una presión inflacionaria, uno ve alrededor y Paraguay está en el promedio, hoy la inflación está cediendo, llegamos a un pico de 11%, hoy estamos por debajo del 10%. Son cuestiones que sí, hay un impacto de todos estos choques, no hay que olvidarse de la sequía, de la guerra, todas estas situaciones tienen su impacto en el mundo», indicó.
Finalmente, insistió en que es momento de cuidar el presupuesto del país, para evitar llegar a extremos que tendrá que pagar el próximo gobierno con el aumento de impuestos, porque no habrá otra forma de cumplir con los compromisos, concluyó.
