Tras la denuncia que realizó días atrás el director de Aduanas, Julio Fernández, en contra del senador colorado Martín Arévalo por supuesto tráfico de influencias, el debate sobre los alcances del contrabando y cómo esto afecta a la economía y la institucionalidad del Estado surgieron nuevamente con fuerza.
La denuncia contra Arévalo constituye otro posible caso de injerencia política en las gestiones recaudatorias de la Aduana, uno de los puestos más apetecibles para beneficiarse a costa del erario público, donde la corrupción política y el contrabando son moneda corriente.
Por su parte, el senador colorado alegó que esto fue una reacción del director de Aduanas, por una denuncia que él ya había presentado sobre el robo de estas mismas mercaderías por un valor de USD 3 millones de dólares, cometido según la denuncia, por Julio Fernández.
Sin embargo, Emilio Fuster, ministro Coordinador Ejecutivo de la Unidad Interinstitucional Prevención y Combate al Contrabando, comentó en conversación con RadioCast25, que esta mercadería se trataba efectivamente de una carga ilícita, dejando a entrever un modus operandi para hacer contrabando a gran escala.
¿Para qué se clonan los containers?
El modus operandi utilizado por estas personas fue la de clonar un container que venía de Montevideo (Uruguay). Un cargamento traía electrónicos con un manifiesto de carga internacional con contenido falso, donde señalaban que traían juguetes y otro tipo de productos, mientras que a la par trajeron otro container de Ciudad del Este, con juguetes, para ingresar dentro de zona primaria de Encarnación”, relató.
Respecto a este caso, Fuster consideró que es una manera ingeniosa ya que normalmente descubren que sacan mercadería en frío (sin pagar impuestos), declarando solo una parte del cargamento, mientras
Normalmente, lo que descubrimos es que sacan mercadería en frío, que solo declaran una parte, mientras que el 50% de mayor valor no se declara, dijo en relación al contrabando en gran escala.
¿Cuánto afecta esto al país?
Según, el exministro del Interior, Rafael Filizzola, todavía hay una gran deuda pendiente del país con el pago de impuestos.
“Hablamos mucho de la formalización, pero más o menos se especula, que la economía subterránea, la informal, pero no la que vende en la calle, la economía informal grande, recauda el equivalente al PBI formal, vamos a decir. Yo hablé con varios economistas, pero nunca nadie me supo decir cómo se saca el cálculo. Si sacás el dato de esa ecuación, quiere decir que el PBI se divide a la mitad”, acotó.
Cabe recordar que en febrero de este año el Consejo Nacional de Productores Frutihortícolas del Paraguay advirtieron al Ministerio de Agricultura y Ganadería que cerrarían rutas si no detenían el contrabando.
En junio, varios gremios como la Cámara Nacional de Comercio y Servicios de Paraguay (CNCSP), FEPRINCO, UIP, ARP, UGP, CAPASU y CAP realizaron un pronunciamiento en contra del ingreso de mercarías de contrabando, pidiendo una serie de acciones puntuales como: destituir a funcionarios involucrados en actividades de contrabando, hacer énfasis en los controles y aplicar sanciones más fuertes a los contrabandistas.
Asimismo, en agosto pasado, los comerciantes de locote también recurrieron a los medios de comunicación, denunciando un ingreso de grandes proporciones de contrabando. Incluso afirmaron que había cierta anuencia del MAG en la realización de ilícitos, porque esta institución les negó la posibilidad de traer locotes de manera legal desde la Argentina.
¿Es posible a corto plazo disminuir los efectos nocivos que genera el contrabando en la economía?
Respecto a la posible solución en corto o mediano plazo, el ministro Emilio Fuster respondió que esto no se va a resolver en los próximos cinco años.
“Es un problema de casi 200 años, inclusive en la época de la colonia tuvimos con el café y la yerba mate. No solo tenemos que combatir con la parte represiva, que hay que hacerlo lógicamente, sino con la parte de concienciación de la ciudadanía, el ciudadano lo que tiene que hacer es pensar en qué está comprando más barato en detrimento de nuestra producción nacional, de la industria que genera empleo”, expresó.
Afirmó que el ciudadano tampoco dimensiona que si compra un producto que vino de manera ilegal, puede ser que lo que está consumiendo no respetó la cadena de frío o de calidad que tiene que tener.
“Otro problema importante también es la corrupción que se produce en los contralores de las diferentes instituciones, como siempre decimos: contrabando y corrupción van de la mano. Se trata de aquel contrabando que se ingresa por lugares de control en rutas, de contubernio con funcionarios públicos, hay contrabando más fino, que ingresa inclusive por zona primaria”, concluyó.