Constantemente en nuestro país se conocen casos de abuso sexual de niños, niñas y adolescentes, ocurridos en el propio seno familiar en un 85% de los casos, además de hechos de violencia física y psicológica hacia la mujer, que muchas veces terminan en feminicidios.
Estas situaciones ponen constantemente en el debate la necesidad urgente de un sistema de educación sexual integral como parte de las políticas de Estado, para prevenir abusos y buscar erradicar cualquier tipo de violencia, desde el respeto hacia el cuerpo de uno mismo y hacia las otras personas.
Sin embargo, ese intento de desmitificar y eliminar tabúes sobre la sexualidad, hacia la consciencia y la libertad personal, se ve obstaculizado por distorsiones provocadas, provenientes desde sectores conservadores y religiosos.
Recientemente, la influencer y bailarina, Jessica Torres, hizo una serie de declaraciones en sus historias de Instagram hablando sobre la religión que actualmente profesa, con aseveraciones controversiales y poco rigurosas como que la “masturbación no genera placer a nadie”, asegurando que las mujeres deben respetar a los hombres, darles el lugar que les corresponde y ser sumisas, mansas y sometidas, según la palabra de dios.
Añadió también que no hay que masturbarse para buscar placer, ya que, según ella, no es una necesidad innata del ser humano.
“No es normal tocarse y que para eso están las relaciones de pareja”, afirmó.
Más allá de ir al aspecto controversial de la farándulas, hay cuestiones importantes que no se pueden dejar pasar en estos casos, y es la desinformación que se puede crear a partir de este tipo de manifestaciones.
En torno a esas declaraciones, habló en comunicación con Latitud25 la psicóloga y orientadora sexual Jazmín Escobar, quien aclaró que no está en contra de que cada persona tenga una expresión subjetiva desde su vivencia, sin embargo, lamentó que personas con influencia y visibilidad, hagan declaraciones sin fundamento científico, que tergiversan la realidad.
“¿Para qué dios creó el clítoris si no es para el placer?“
Para hacer más didáctica la explicación sobre la relevancia del placer en la mujer, la psicóloga hizo referencia a las creencias religiosas y trató de hacer un reflexión más razonable en esa línea de pensamiento.
“Si ella cree que dios hizo nuestro cuerpo y dice que la masturbación es pecado, entonces ¿para qué existe el clítoris? Porque solamente la vagina es necesaria para la reproducción, no necesitamos clítoris para tener hijos”, indicó.
“Si hablamos de sometimiento al hombre –que se le asocia al falocentrismo, coitocentrismo, hablamos de un mero sexo penetrativo convencional–; ¿Alguien me puede explicar para qué existe el clítoris? El clítoris no tiene otra función que darnos placer, entonces hay una concepción desde dios o desde la naturaleza humana para la mujer de ser autónoma de su placer, de sentir placer, que no sea exclusivamente el sexo reproductivo, o sino no hubiésemos tenido clítoris, íbamos a tener solamente una hermosa vagina para procrear”, argumentó.
La masturbación es natural pero no está normalizada por creencias
En ese sentido, la especialista en sexualidad reconoció que la masturbación no es normal, porque cuando hablamos de normalidad, hablamos de normativa y la normativa se basa en convenciones, en los dogmas sociales, políticos y culturales.
“Hay una no-normalidad, anti-normalidad especialmente para las mujeres. Lo natural debería ser normal, o sino estamos yendo en contra de la naturaleza humana, pero estamos hablando primero del castigo, de la parte punitiva del pecado, desde el miedo, no desde la comprensión”, explicó.
En ese contexto, citó solo algunos de los efectos positivos que produce la masturbación en el cuerpo de la mujer, puesto que disminuye el estrés, al eliminar el cortisol; reduce los dolores menstruales, libera endorfinas, exitosina y dopamina.
Manifestaciones refuerzan creencias machistas que hacen daño al hombre y la mujer
La sexóloga Jazmín Escobar sostuvo que es un peligro que una persona con un alcance de millones de personas pueda estar instalando ideas sobre conceptos que tanto cuestan desmitificar.
“Son miles de conceptos arraigados a una hegemonía machista, heteropatriarcal que tiene consecuencias nocivas, ya que hay un funcionamiento psíquico interno que se desarrolla a raíz de nuestras creencias”, detalló.
Dijo además que si existe una creencia puntual, tanto la sexualidad, como la conducta y la actitud van a responder a ese sistema de creencias. Sin embargo, resaltó que cuando ese sistema de creencias está distorsionado, existe un problema, el cual va en contra de los intentos de las personas, en desmitificar conceptos sexuales tan machistas, que hacen daño a hombres y a mujeres.
“Es ignorante en la materia, porque uno puede decir: ‘yo creo para mi vida’, pero ella hace un dictamen que le desconfigura la mente a sus seguidores. Yo no quiero juzgar su vida, pero hay que reconocer que existe un doble discurso; ella utiliza todo el tiempo su cuerpo de una manera seductora, ella puede hacer lo que quiere, está bien, pero se contradice mucho entre lo que dice y lo que hace”, cuestionó.
La sumisión es una violencia hacia los derechos de la mujer
Por otra parte, Jazmín Escobar descargó ácidos comentarios en contra de las declaraciones de Torres de que “la mujer tiene que ser sumisa”.
En ese punto, resaltó que criticar la masturbación es solo el inicio de buscar la sumisión, “porque están diciendo que hay que someterse al hombre, para recibir placer, porque es el otro el que te tiene dar placer, no vos. ¿Entonces no sos dueño o dueña de tu cuerpo?”, consideró.
Acotó que ese tipo de pensamientos cosifican a la mujer, porque se habla de que el hombre tiene posesión sobre ella.
“Estamos en un estado puro de cosificación si hablamos de sumisión, pero quienes que estamos luchando desde la equidad de la igualdad de hace cuántos años, buscamos que se respeten nuestros derechos libres. La mujer puede estar con el hombre desde una elección no desde una sumisión, esta sumisión es una violencia hacia los derechos de la mujer”, respondió.
Según la especialista, lo que está haciendo Jessica Torres con sus dichos es inocular una ideología con una regresión que violenta miles y miles de años en los que se está tratando de derrumbar creencias culturales fuertemente consolidadas que crean enormes daños a la sociedad.
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