El proyecto “Asunción, ciudad verde de las Américas – Vías a la sustentabilidad” se viene trabajando desde hace varios años, con el objetivo de instalar bicisendas. Desde sus inicios, este plan representó una llamativa paradoja, al denominar a Asunción como una ciudad verde, cuando la mutilación de árboles es una constante en las calles de la ciudad y las iniciativas de sostenibilidad aun son resistidas.
En octubre de 2022, se dio la palada inicial para la construcción de los dos primeros troncales de la Red de Bicisendas del Área Metropolitana de Asunción. Si bien, desde el comienzo este proyecto no pasó desapercibido, no fue hasta la definición de su itinerario que los cuestionamientos empezaron a brotar en la opinión pública.
Este es un proyecto encabezado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en conjunto con autoridades nacionales. Están involucrados en el proceso el MOPC, el Mades y municipalidades, como la de Asunción.
En el marco de esta propuesta, ya son varias las calles de la Capital en las que se pusieron divisorias y se marcaron las líneas de la bicisenda. Esto generó controversia acerca de la reducción de espacios para estacionar en varios puntos.
Incluso, varias de las personas que están en contra de la bicisenda, apuntaron a que no hay ciclistas que usen ese sendero. En contrapartida, a los ciclistas que siguen quejándose de automóviles que obstruyen el paso de las bicicletas.
Resulta llamativo, que quienes cuestionan la implementación de las bicisendas no consideran alternativas viables para descomprimir el caótico tráfico de Asunción, ni evitar el uso del decadente transporte público.
A raíz de los cuestionamientos, RadioCast25 habla con Fernando Duarte, director del Centro Histórico de Asunción y Federico Mora, jefe de Gabinete de la Comuna capitalina.
Opción viable, en una ciudad saturada
El director del Centro Histórico afirma que la Municipalidad está tratando de adaptar el tránsito para que la ciudad pueda tener una variedad de transporte.
“Necesitamos que haya propuestas concretas y viables para solucionar el transporte público no solo de la ciudad, sino del área Metropolitana porque eso hoy es un tema crítico”, subraya.
Asimismo, resalta que la bicicleta no viene a reemplazar el transporte público de larga distancia. “Nosotros necesitamos mejorar nuestro transporte público. Necesitamos el tren de cercanías, para que la gente de la parada pueda andar en bici”, acota.
A su vez, Federico Mora reconoce también que estamos en una ciudad saturada por el tránsito. En ese punto, sostiene que la concepción de la bicisenda no está pensada como ocio, sino como alternativa de movilidad.
“Porque nos va a vincular con Luque, en el tramo que va por Costanera de Asunción y con Fernando de la Mora y San Lorenzo”, explica.
Resalta que Asunción maneja las líneas internas, para las cuales van a plantear la figura de consorcio, para que entre todas, por ejemplo, hagan su mantenimiento, en un taller único.
“Porque hoy el transporte público de Asunción, que no recibe subsidio está por fenecer. Nosotros sí estamos tomando las medidas en lo que es que es Asunción. Las líneas interurbanas, eso corresponde al Viceministerio de Transporte, sobre todo cómo generamos mayor frecuencia. Esto es para acompañar un proceso para generar alternativas en el transporte”, enfatiza.
El cambio de paradigmas
El director del Centro Histórico, Fernando Duarte, responde a los cuestionamientos y críticas a la bicisenda, asegurando que las innovaciones traen mucha resistencia.
“Son cambios a los que los ciudadanos no están acostumbrados; ponen resistencia, simplemente por el hecho de que no quieren cambiar. Cuesta porque estamos muy acostumbrados a que el automóvil sea “el rey”, para encontrar una descripción y, que el espacio sea solo para el automóvil. Este es un cambio de paradigmas, que hay que ir haciendo de poco, que muchas ciudades lo fueron entendiendo, invirtiendo muchísimo dinero”, expresa.
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Además de las calles, manifiesta que también tienen que adaptarse las oficinas, con espacios para dejar las bicis y duchas para sus trabajadores.
Resalta que esa modificación de la cultura consiste en cambiar la idea de la manera de transportarse en la Capital. Aclara que consiste, no solamente en hacer bicisenda, sino en mejorar el transporte público y generar mayores espacios para peatón, para que las personas se desplacen a pie.
Agrega que esto tiene que ver con muchos estudios que hablan de la calidad de vida, del medioambiente y de las muertes en la ciudad causada por automóviles. “Entonces hay mucha ciencia, detrás de hacer las bicisendas, no es solo un capricho”, puntualiza.
Duarte, afirma además, que después de la pandemia, hay mucha gente que opta por moverse en bici. Esto tiene relación con la suba combustible, que cada vez está más caro y el tráfico que cada vez está peor.
Mora asegura que el debate comunitario existió, que se sigue dando espacios de conversación y debate en las comisiones vecinales, ya que es un proceso que todavía está en construcción. Sugiere, que en ese mismo sentido, estas charlas se deben dar también en las ciudades de Luque, Fernando y San Lorenzo.
La gente está acostumbrada a estacionar enfrente
Fernando Duarte recuerda que, desde el 2006 aproximadamente, está prohibido estacionar sobre la calle Palma, pero esta disposición nunca se respetó.
“La gente está acostumbrada a estacionar en frente al lugar en donde se quiere ir, entrando a veredas y lugares prohibidos, esa es una mala costumbre que tenemos. Esto de alguna manera va a venir a ordenar un poco el tráfico”, apunta.
Ante los cuestionamientos de los comerciantes, Duarte sostiene que la evidencia científica habla de que las bicisendas aumentan las ventas, de los comercios cercanos. En ese punto, hace referencia a un estudio realizado por el municipio de New York City, el cual demuestra que las bicisendas aumentan las ventas hasta en un 49%.
Asimismo, recuerda que esto todavía está en construcción y que en las últimas semanas se completó las señalizaciones en la Calle Palma.
“Lo ideal es que todas las bicisendas tengan una especie de cono, pero es mucho mayor la inversión que se debe hacer acompañando la inversión que hizo el PNUD”, aclara.
En cuanto a Palma, Federico Mora habla nuevamente sobre la posibilidad de hacerla peatonal. Enlista las razones, de por qué la Municipalidad considera de nuevo esta idea.
“Tiene las características para ser peatonal: primero, porque es corta, nace en México después de la Plaza Uruguaya, no es una vía de acceso consolidada. Es un tramo donde ya no se puede luego estacionar hace 10 años, ya tuvo luego un ensanchamiento de la vereda hace dos administraciones, para reducir el tránsito vehicular. No es una calle de acceso rápido vehicular, tiene edificios históricos. Ahora se agrega la bicisenda. Es un lugar que es para ferias y conciertos”, argumenta.
¿Qué modelo de ciudad estamos construyendo?
En este punto, tenemos que hablar de la ingeniería de tráfico, que es un concepto económico, en realidad, cuenta Duarte.
“Cuando uno hace más autopistas, hay más automóviles, asimismo también cuando uno hace más bicisendas, van a haber más personas andando en bici. De eso se trata un poco, de aprender a compartir el espacio público, en este caso, la calle para poder transportar personas, no solamente autos”, reitera.
Hay varios ejemplos en Latinoamérica: tenemos, por ejemplo, a Bogotá y Buenos Aires, además de ciudades más pequeñas de Argentina, como Salta.
“También tiene mucho patrimonio histórico, ciudades de Bolivia que están implementando bicisenda, ni qué hablar de Brasil, que ya está a otro nivel”, ejemplifica.
Por su parte, Federico Mora, reconoce que si bien esto es una novedad para Asunción, por decir de alguna personas, coincidió con Duarte en que va a generar su propia demanda.
“Porque muchas personas nos dicen: ‘¿y dónde están los ciclistas?’ Van a aparecer cuando tengan su espacio seguro para circular. Nosotros desde el Municipio estamos convencidos de que es una necesidad que esto continúe y se desarrolle”, concluye.
